Latta Nigel, un psicólogo de Nueva Zelanda, se le llama un verdadero mago en la psicología infantil moderna. Latta Nigel ha estado practicando durante 16 años, y es reconocido como un experto en casos descuidados y desesperados.
Su conocimiento adquirido es necesario no solo en aquellas familias donde viven niños difíciles, sino también en las ordinarias. Gracias a los principios básicos que identificó en la educación, es posible lograr un entendimiento mutuo con el niño. El niño no percibirá a los padres como enemigos, y se cerrará de ellos, pero será amigable.
Si solo quieres tener hijos, entonces te será útil leer este artículo. Ya sabrá cómo comportarse y no cometerá errores en la educación.
10. Desarrolla una relación
Las personas están acostumbradas a desarrollar relaciones con sus amigos, parejas, pero por alguna razón se olvidan de hacer esto con sus hijos.
Un niño es la misma persona, y no solo necesita ser regañado o alabado, para evaluar las acciones desde el punto de vista del padre, sino para comunicarse y tratar de entenderlo.
El niño debe ser tratado como una persona y con respeto. Con su ejemplo, usted le enseña a su hijo a interactuar con otras personas, y la actitud debe ser humana, sincera.
Muchos padres cometen un gran error: intimidan a un niño si hace algo mal. Algún día crecerá y ya no te tendrá miedo, pero ciertamente no tendrá un incentivo para observar la moral.
9. Presta atención
Los niños pequeños son muy codiciosos de atención, necesitan mucha, casi en exceso. Nunca es suficiente, y para conseguirlo, los niños recurren a varios trucos.
Por ejemplo, muchos niños, habiendo aprendido que los padres notan sus caprichos, a menudo los usan para sus propios fines. Eso es solo que se vuelve contra ellos.
La cuestión es que los niños tienen un instinto natural: se sienten seguros junto a sus padres y están listos para hacer todo lo posible para que no los dejen ni un minuto. Si deja al niño desatendido durante mucho tiempo, entonces, con sus mimos, le chupará todos los jugos.
8. Mostrar simpatía
Todos los niños tienen un sentimiento innato de que sus padres los aman. Incluso si regañas y castigas a tu hijo, él todavía cree en tu amor. Pero si hablamos de simpatía, entonces esto es completamente diferente.
Los niños sienten que los extraños les son indiferentes y se relacionan incluso con un escalofrío. Se sienten igual de bien si a sus padres no les gustan.
Los padres saben lo que es el amor, pero muestran amor con dificultad. El amor de los padres es un instinto, y la simpatía puede surgir si le gusta lo que hace su hijo y disfruta de su personalidad.
Trate de prestar más atención a su hijo, interesarse por él y educar en él a la persona que le gusta.
7. Establecer límites
A veces, algunos padres no establecen límites para sus hijos y dejan que su educación se desplace. ¿Qué saldrá de esto? Nada bueno. Las madres tienen miedo de limitar a sus hijos en algo, porque son pequeñas y frágiles, y su psique se verá afectada por caprichos.
Si permites todo a tus hijos, se convertirán en verdaderos monstruos.
No tengas miedo de estropear la relación con tu hijo: ponle restricciones severas y dile: "Es imposible" si comete malas acciones. Entonces llegará pronto el momento en que recordará que "es imposible" y podrá respirar con calma.
6. Fomentar lo bueno
¿Te gustó lo que hizo el niño? Anímalo por eso. El hecho es que cuando un niño siente su satisfacción con él, entonces cualquier cualidad crecerá en él.
La regla principal es ignorar las malas acciones, pero siempre notar las buenas y alabarlas. Dígale a su hijo con la mayor frecuencia posible que está satisfecho con su buen comportamiento.
Si no le gustan sus caprichos, no hable de ello y demuestre su descontento. El tiempo pasará y el niño, al no haber recibido su atención, dejará de actuar por sí mismo.
5. Sigue la secuencia
Para las mismas acciones que no necesita alabar o castigar, siga la secuencia. Nadie dijo que es fácil ser padre, pero tú mismo lo has elegido.
Por el bien de la paz, el padre puede comenzar a comportarse de manera inapropiada, pero el niño no entenderá por qué ahora se ignora algo por lo que fue elogiado anteriormente.
Trate de no confundir a su hijo, si por algo lo elogió, continúe haciéndolo, si algo es "imposible", entonces deje que permanezca prohibido, aunque esté de buen humor.
4. No perdones
Los padres se equivocan mucho cuando perdonan a sus hijos por su mal comportamiento. Los niños aprendieron que si hicieron algo malo, el tiempo pasará y sus padres los perdonarán.
Si un niño insulta a sus padres, se porta mal y hace berrinches, no hay necesidad de perdonar esto. Si el niño tiene un comportamiento inapropiado, esto no solo debe ignorarse, sino suprimirse.
Al mismo tiempo, uno no necesita suprimir la voluntad de su hijo: puede tener su propia opinión, puede discutir con usted, pero tratar sin respeto no lo hace.
La controversia, por el contrario, es un elemento muy importante en la comunicación con un niño: significa que está creciendo como una persona independiente y puede pensar por sí mismo.
3. Comportamiento - comunicación
Los padres a veces no entienden que su comportamiento quiere que el niño les transmita algo. Esto no siempre se hace conscientemente, pero quiere llamar la atención.
Incluso si su hijo se comporta muy mal, de esta manera intenta comunicar algo. El mal comportamiento también puede significar que usted lo educa incorrectamente, lo que lo alienta en aquellas situaciones en las que no necesita, no preste atención.
Presta atención a lo que está haciendo tu hijo. ¿Qué quiere decir con esto? Usted, como padre, debe descubrirlo.
2. No pelees
Los niños son siempre el caos, la confusión, la agitación que no puedes manejar ... Si llevaste una vida tranquila y mesurada en un horario, entonces con el advenimiento de los niños cambia.
Su pedido puede ser destruido en cualquier momento, y usted tiene que aguantarlo. Si no lo haces, entonces el caos te derrotará.
Si la locura ha comenzado (su hijo es travieso, discute, lo ofende), espere este momento, después de la tormenta seguramente aparecerá el sol.
1. Haz un plan
Los niños son diferentes: algunos son más tranquilos, mientras que otros son incontrolables. El segundo es más difícil. Por lo tanto, si desea criar a un niño incontrolable, necesita un plan.
Elija un comportamiento que no le convenga en el niño y escriba sobre ello en un pedazo de papel. Escriba las ideas que considere más efectivas para tratar el mal comportamiento.
Trate de cumplir con su plan y recuerde que siempre hay formas de superar cualquier dificultad.